Este fin de semana, de los días 27 al 29 del presente mes de octubre, el Centro de Espiritualidad Santa María de Los Negrales (Madrid) de la Institución Teresiana, ha acogido el XLVI Encuentro de Rectores y Formadores del Seminario Mayor, organizado por la Comisión Episcopal de Seminarios y Universidades, con el tema: “Custodiar y cultivar las vocaciones: claves para poner en práctica la nueva Ratio Fundamentalis”.

Por el interés del tema el encuentro ha estado abierto también a los formadores de los seminarios menores que quisieran participar.

La masiva asistencia de rectores, formadores y directores espirituales procedentes de los seminarios mayores y menores de las distintas diócesis de toda España, cerca de centenar y medio de sacerdotes, ha corroborado el interés que este tema suscitaba. Entre ellos estuvieron presentes los equipos de los seminarios Mayor San Fulgencio y Menor San José de Murcia.

Al encuentro asistieron también varios obispos, miembros de la Comisión episcopal de Seminarios y Universidades.

Durante las sesiones de trabajo tuvieron lugar tres ponencias, todas ellas desarrolladas de forma magistral por Mons. D. Jorge Carlos Patrón Wong, Secretario para los Seminarios de la Sagrada Congregación para el Clero. Tales ponencias fueron: “Principios generales de la Ratio Fundamentalis”, “Las estructuras formativas” y “El equipo formador”.

También se realizó una mesa redonda de trabajo, de todos los asistentes, en torno al tema: “Trabajando en la nueva Ratio Nationalis”.

Han sido días de intenso trabajo en los que se ha podido profundizar en las orientaciones contenidas en la Ratio Fundamentalis, con el fin de poder responder a los procesos de acompañamiento de los futuros pastores. Todo ello ha tenido lugar en un estimulante contexto de fraternidad y comunión eclesial, con un sincero deseo de aprender y de mejorar en este servicio tan importante que la Iglesia requiere.

Igualmente digna de destacar ha sido la presentación efectuada por el ponente único, Mons. D. Jorge Carlos Patrón Wong, quien con sencillez pero con gran celo y precisión, supo presentar la nueva Ratio Fundamentalis como el instrumento que Dios ha dispuesto, en su amorosa providencia, para hacer frente a los desafíos de la formación sacerdotal que la nueva realidad social y eclesial, con sus luces y sus sombras, presenta.

El sentir general al acabar el encuentro fue el de que no sólo las expectativas generadas por el mismo en el plano teórico se habían cumplido sino que, además, había sido un momento de gracia que devolvía a los formadores a sus respectivas diócesis con renovada ilusión y fortaleza para seguir sirviendo a la Iglesia en cuestión tan crucial como es la formación y el acompañamiento de los futuros sacerdotes.