El Pasado día 19 de mayo tuvo lugar la solemne Eucaristía de Acción de Gracias por la ordenación Episcopal de D. Sebastián Chico Martínez, Obispo Auxiliar de la Diócesis de Cartagena, en la Iglesia parroquial de Santa María Magdalena de Cehegín, su tierra natal. Fue un evento emocionante en el que, le acompañaron D. José Manuel Lorca Planes, Obispo Diocesano de Cartagena, y D. Francisco Gil Hellín, Arzobispo emérito de Burgos, residente en nuestra Diócesis; también de D. Jesús Belmonte, el párroco que le bautizó hace 50 años y, actualmente, canónigo de la Catedral de Murcia, y otros muchos sacerdotes venidos de numerosos puntos de la Diócesis, además de de los tres Seminarios de nuestra Diócesis.

En esta ceremonia no podía faltar la madre de los cehegineros: la Virgen de las Maravillas, que procesionó desde el Convento franciscano hasta la Iglesia de Santa María Magdalena, y posteriormente volvió en procesión hasta su Santuario. Firme y decidida fue la profesión de fe que realizó delante de toda la asamblea en la pila bautismal donde fue bautizado, y en su homilía, además de contarnos alguna que otra anécdota graciosa de cómo en torno a este templo creció su fe y su vocación humana y cristiana, también nos desveló el tercer punto de su proyecto pastoral: ser un hombre de comunión. Es el tercer y último de los tres que tiene como meta, al comienzo de su ministerio:

Ser un hombre de esperanza, ser un pastor cercano a la gente y a los sacerdotes, especialmente a los sacerdotes jóvenes, y ser un hombre de comunión. Desde que llegó, numerosas han sido las muestras de aprecio y de apoyo a su persona y de adhesión a su ministerio. Deseamos que Dios le bendiga y le ilumine para desempeñar fielmente la labor que la Iglesia le ha encomendado.